martes, 15 de noviembre de 2016

¿Eres un pobre soñador?


Ante un grupo de niños un hombre narró la siguiente historia:

Había una vez un muchacho quien era hijo de un entrenador de caballos. El padre del muchacho era muy pobre. Una mañana en la escuela, el profesor le pidió a los alumnos que escribieran la meta que quisieran alcanzar en su vida.

El joven escribió una composición de siete páginas, describiendo su sueño con mucho detalle y hasta dibujó un plano de todo el proyecto: el rancho, las pesebreras, la ganadería, el terreno y la casa en la que quería vivir; en fin, puso todo su corazón en el proyecto y al día siguiente lo entregó al profesor.

Dos días más tarde, recibió de vuelta su trabajo reprobado, y con una nota que decía:”venga a verme después de clases”. El chico del sueño fue a ver a su profesor y le preguntó: -¿Por qué me reprobó?
El profesor le dijo: -”Es un sueño poco realista para un chico como tú. No tienes recursos; vienes de una familia pobre. Para tener lo que quieres hacen falta muchas cosas y además mucho dinero. No podrías hacerlo de ninguna manera.

A continuación el profesor agregó: -"Si vuelves a hacer el trabajo con objetivos más realistas, reconsideraré tu nota”.

El chico volvió a su casa y pensó mucho. También le preguntó a su padre qué debía hacer. Éste le respondió: -”Mira hijo, tienes que decidir por ti mismo; de todos modos, creo que es una decisión importante para ti, ¿cierto?”

Finalmente después de reflexionar durante una semana, el chico entregó el mismo trabajo, sin hacer cambio alguno.

Le dijo al profesor: -”Usted puede quedarse con mi mala nota, yo me quedaré con mi sueño”.

Al concluir el hombre miró a los niños y les dijo: -”Les cuento esta historia porque es mi historia. Aquí estamos en medio de la casa de mis sueños, dentro del rancho que me propuse conseguir por que esa era la meta de mi vida. Aún conservo aquella tarea del colegio enmarcada sobre la chimenea”.

Luego agregó: -“Lo mejor de la historia es que hace dos años, ese mismo profesor trajo a treinta chicos a visitar mi rancho. Y al irse el profesor me dijo: “mira, ahora puedo decírtelo. Cuando era tu profesor, era una especie de ladrón de sueños. Por suerte tuviste la suficiente fortaleza para no abandonar el tuyo’.”

No dejemos que nadie nos robe nuestros sueños, ni tampoco le robemos a otros los suyos.

viernes, 11 de noviembre de 2016

Dejemos de SER víctimas, y empecemos a ser HÉROES.

Vamos a tomar acción y responsabilidad por la parte que SI podemos cambiar!


Señores, si tanto miedo le tienen a #Trump y a la subida del #dólar, ponganse a consumir bienes y servicios mexicanos. En lugar de tener tarjetas de crédito o débito Banamex cámbiense a INBURSA que es un banco 100% mexicano.

Al viajar, opten por algún hotel local en lugar de un Hilton o un Marriott. En lugar de comprar la carne en tiendas de grupo Wal-Mart, compren con el carnicero de la esquina; o en lugar de adquirir el pollo rostizado en Sam's o Costco, vayan a alguna rosticería local. En lugar de comprar pantalones levi's, compren pantalones Montero, que son de más calidad e incluso en el extranjero se venden carísimos y, por cierto, se manufacturan en Aguascalientes.

Dejémonos de ser ridículos y pensar que porque compramos la fruta en el HEB o en Superama somos mejor que los demás. No hay fruta más natural que la del agropecuario y si no se quieren meter al agro no hay problema, todas las fruterías de la ciudad se surten ahí.

Consuman papas naturales en lugar de sabritas que, aunque en su inicio fue mexicana, fue adquirida por pepsico. En lugar de comprar un traje Calvin Klein, compren a una sastrería local, que por cierto, si le buscan les aseguro que encontrarán trajes de mejor calidad y precio. Al sentirse "fresas" o "nice" y consumir de modo malinchista lo único que hacemos es darle en la torre a la economía local, echar para abajo al peso y encarecer todo nosotros mismos.

Ya se vio que la población de Estados Unidos es más racista y xenofóbica de lo que imaginábamos, y aún así ¿le vamos a seguir mandando nuestro dinero que con tanto esfuerzo y sacrificio nos ganamos a esa gente que comparte las ideas de Trump al grado de votar por él, o mejor lo dejamos con los comerciantes y emprendedores de nuestras colonias, estados y nación? ¿Qué prefieres, que con tu dinero tu vecino el carnicero complete la colegiatura de su hija este mes o que el gerente de McDonald's rente un helicoptero nuevo en New York?

Las redes sociales son muy poderosas y día a día las utilizamos para diversión y mandar bromas y memes. Es hora de que como sociedad organizada que somos, tomemos cartas en el asunto y comencemos una campaña a favor del consumo local. No tenemos nada que perder y todo que ganar!!!

¡Comparte si estás de acuerdo!

¿Cómo calcular tu número personal?


Es el resultado de la suma de tu día de nacimiento hasta convertirlo a un solo dígito, aplica para todos los números del mes del 1 al 31, excepto para el 11 y el 22, estos son los únicos números que dentro de la numerología tendrán 2 dígitos ya que son números maestros.

Ejemplo:
Año: 1994
Mes: 08
Dia: 31
Suma: 1994 + 8 + 31 = 2033 = 2+0+3+3 = 8.
El reconocer y actuar plenamente la energía que compone tú número personal, será una tarea en la que tendrás que trabajar, a lo largo de tu vida y que iras perfeccionando y autoafirmando a través de cada lección que vayas enfrentando año tras año en tus ciclos de vida numerológicos.

El número personal o logro de tu propia identidad tiene una relación directa con el significado del mito solar y la interpretación que se le ha venido dando a lo largo de la historia por parte de las diferentes culturas, filosofías y ciencias dedicadas a la búsqueda de la sabiduría y de la conexión energética entre el mundo espiritual y el material.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Tú también puedes ser una persona tóxica.

En ocasiones nosotros mismos somos la persona más tóxica, y es que adoptar el rol de víctima es mucho más cómodo que luchar por cambiar lo que no nos gusta.

Continuamente hablamos de las personas tóxicas, de cómo identificarlas y cómo poder neutralizarlas. Pero… ¿Por qué siempre pensamos que los tóxicos son los demás? ¿Y si la persona tóxica fueras tú?

Probablemente, nunca hemos pensado en esto porque, como dice un conocido refrán, “es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio”.

Si lo piensas, seguramente alguna vez has manipulado a alguien para lograr un beneficio o has hecho partícipes a los demás de tus emociones negativas.

¿Nunca te has quejado continuamente? A veces, nosotros también nos equivocamos.

Poner la responsabilidad en otros es muy cómodo

Sin duda, poner la responsabilidad en manos de los demás es mucho más cómodo que enfrentarnos a nosotros mismos.

Cuando hacemos un examen de conciencia y lo que vemos no nos gusta, empezamos a poner excusas para no enfrentar toda la responsabilidad que tenemos.

Lo mejor sería aceptar esas partes de nosotros que no nos agradan, pero preferimos escapar de ellas y negarlas.

¿Por qué siempre queremos ser los buenos? Parece que los malos siempre son los demás y nosotros las víctimas de todo y de todos. Esto, de por sí, nos convierte en una persona tóxica.

¿Te acuerdas ahora de lo tóxicas que eran las personas victimistas?

Ser conscientes de que hemos cometido errores y de que no somos tan perfectos como nos gustaría implica esforzarse por cambiar eso y mejorar. Pero, siendo sinceros, esto nos da pereza.

Es mejor la otra opción, la de víctima, la de quejica, la de persona tóxica. Es mucho más sencillo dejarse llevar por lo negativo que luchar por lo positivo.

Puede que la vida no esté siendo justa contigo y que, verdaderamente, tú no seas una persona tóxica. Sin embargo, sin darte cuenta, te estás convirtiendo en una cuando no tomas cartas en el asunto y te rindes a quien es tu verdugo.

Fuente: Cosmoplug